- ¿Cómo consiguió enamorar al viejo Lalarga?
- Muy sencillo, el abuelete chocheaba, pero le gustaban las mujeres y perdía los esos cuando veía una falda, aunque se la pusieras a una escoba. Lalarga tenía el despacho en el piso de arriba del pub donde yo trabajaba, y todas las noches venía aquí y se bebía el Mediterráneo en whisky. Le acompañaba siempre su hijo. Su hijo se enamoró de mi, y yo de él. Verme los codos y ¡zamba!...
- ¿Los codos?
- Sí, mire- se arremangó y me mostró los codos.
- ¡¡¡Guauuuuu, son preciosos!!! ¿Puedo encender una fósforo?
- Hágalo y es hombre muerto...total, Lalarga hijo me contó la vida de Lalarga padre y supe que él había sido el que nos abandonó, a mi abuelita,a mi madrecita y a mimita. Lo demás fue bien sencillo: Tito estaba harto de su padre, y tramamos su asesinato.
- Pero usted se casó con su padre,¡¡¡eso es un canasto!!!
- Bueno, tampoco era para tanto, era como acostarse con la momia de Hamurabi empapada en alcohol. Y ahora usted tiene las cartas de mi abuela que nos relacionan con todo éste feo asunto. Ya hemos heredado, tenemos planes de boda muy lejos de aquí, y aparece usted, pequeño gilipollas y lo estropea todo.
- ¡Qué equivocado estaba con usted!...su madre...su madre...
- ¿Mi madre?, ¿cuándo vio usted a mi madre por última vez?
- Cuando ella tenía nueve meses
- ¿Y la recuerda?
- ¡Clairo!,¡nunca la he olvidado!. ¿Sabe qué fue lo último que me dijo antes de despedirse para siempre?
- Lo cualo.
- Gú gú, ñiá ñiá, dada.
- ¡Acojonante!...pues como no me entregue las cartas de aquí a dos días su amigo Florino morirá, y después usted.
- ¡Deme tiempo!,¡las tendrá!
- No hay más daño que el tiempo perdido, y es lo que usted está haciendo.
- En un minuto hay muchas días, Ana.
- ¿Hoy no tiene ganas de enigma?
- Le tengui...¡allá va! Me sucedió hace unos años...Me encontré en medio de un enorme descampado un hombre muerto en un campo. Yo llegué (gracias, Charo, majeta) apenas tres minutos después de su muerte, todavía estaba caliente su cuerpo.Ni rastro de sus huellas. A su lado había un paquete sin abrir. Te aseguro que no había nadie más en el campo. ¿Como murió?
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HASTA EL DOMINGO.
Es un paracaidista, el paquete tío listo es el paracaidas que no se abrió, la leche que se pegó ese hombre era mortal de necesidad y hasta Panete se dió cuenta de que estaba muerto, muerto, pero muerto.
ResponderEliminarOtra opción que comenta mi sr. esposo es que fuese un paquete de marlboro sin abrir y el hombre se ha muerto de cancer de pulmón, que con las pistas que das entra dentro de lo posible, porque vaya mierda pistas.
Hay más opciones pero paso de seguir diciendo chorradas varias.
"Yo llegé apenas tres minutos después..." esas prisaaaaaassssss..... Me copie "llegué" mil veces, caballero...
ResponderEliminarBesacos "sabadeños" (que no es un grupo coral canario, no)
Saltó de un habión pero hel paracaidas no se habriò.
ResponderEliminar¡Oh! ¡Sí! ¡¡Sí!! ¡¡¡Sí!!! ¡Casi no me lo puedo creer! ¡Lo sé! Cualquier caballero legionario paracaidista lo sabe. Asín pues, no es necesario acudir humildemente a la consulta de mi mujerúnicacónyuge o entrar en consejo con alguno de mis vástagos sabelotodos. El paquete es el "paraca" que no se le desplegó al occiso.
ResponderEliminarF. A. de Manuela
No había rastro de sus huellas porque cayó del cielo. Se estampó contra el suelo. Era un paracaidista al que no se le abrió el paracaídas (paquete sin abrir)
ResponderEliminarEra un paracaidista al que no se le abrio' el paracaidas (ese es el paquete que esta' a su lado).
ResponderEliminarAnda, pon mas de estos que no son de mates. Porque con los que hay que calcular, me suben unas calores y una ansiedad, y me ahogo.
Ganadores Jerónimo,Pedro,FA de Manuela, Fidel y Marian
ResponderEliminarGracias a Charo por la corrección.
número de la ONCE de mañana
70347